Crónica de Francisco Luis Vidal.
El día 05 de mayo nos reunimos cinco socios del club en una quedada cuanto menos atípica, se trataba de montar y pintar una maqueta de un m113 en un día.
El objetivo era montarla tal cual lo hacíamos en nuestros comienzos modelísticos. Se quería hacer una maqueta setentera con técnicas ochenteras.
Los cinco que nos alistamos a este proyecto fuimos Joaquín, Pachu, Paco Lao, Nacho Bértiz y yo, Francisco Vidal.
Empezamos a las diez y media de la mañana en un ambiente muy distendido y relajado, a medida que pasaban las horas nos dimos cuenta en el “fregado” que nos habíamos metido, o mejor dicho, en el “fregado” en el que el pardillo que “suscribe” había metido a sus compañeros.
Comenzó el estrés y el ver que nos faltaba tiempo, o mejor dicho a algunos, porque en honor a la verdad hubo un claro vencedor que fue Paco Lao por K.O. técnico. Nuestro joven amigo con una marcialidad militar, resolvió su maqueta en los plazos por él mismo asignados.
Dicho sea de paso que nos hizo nuestro desafió aún mayor porque no dudo en refregarnos lo retrasados que íbamos en relación a él, hundiéndonos más en la miseria. Joaquín no llegó a la pintura pero su montaje fue ejemplar, propio de un maestro.
Nacho resolvió un M113 de forma tranquila, metódica y cuidada, pintura incluida, un trabajo delicado y fino. Pachu, ¡qué decir de Pachu! , un experto, o mejor dicho, un mago usando los sprays de Tamiya , gran M113 el de Pachu.
Si hubo alguien con el que especialmente nos ensañamos fue con Joaquín, debido a la mala planificación por mi parte, (yo me encargaba de las pinturas), teníamos 4 botes acrílicos de olive drab XF62 pero que implicaban aerógrafo, con todo lo que eso ralentiza. ¿Qué sucedió?, que llevé un solo bote de spray porque pensaba que el secado era lento, y por el contrario era mucho mejor para maquetas de un día.
Joaquín no paró de recibir zancadillas por nuestra parte desde el minuto uno, cuando acabó el montaje ya no quedaba pintura en spray para su maqueta, eligió la versión alemana del M113 , y luego yo que dije que la iba a hacer la versión americana decidí hacer la alemana, y le pisé la suya, como colofón del montaje al transportar su maqueta al final del día se me cayó… su cara era un poema, la mía otro, todo eso mientras a Paco Lao y a Carlos Alba les daba un ataque de risa de presenciar la escena.
Respecto a mi M113 os comento, fue un auténtico churro, Joaquín en su exquisita diplomacia la definió como muy ochentera, es decir, un auténtico “truño”. La imprimación fue deplorable y se me pego al papel donde estaba la maqueta apoyada, al dar el color base, afloraba el color de la imprimación, cayeron gotas de disolvente sobre la pintura …al final semejante disparate lo “resolví” con spray de Tamiya con las consiguientes acumulaciones de pintura por distintos sitios… que luego toqué con el dedo y la dejé marraneada… Si debo resaltar un detalle es la figura arcaica que venía en el kit de cara casi simiesca que Carlos Alba se atrevió a montar y pintar y que en menos de media hora volvió a la vida, sacándole vida al secarral que suponía.
A nivel modelístico os he descrito los resultados pero a nivel personal debo decir que el día que pasamos fue inolvidable. Los que estuvimos embarcados en esta aventura, lo hemos definido como inolvidable, no pudimos reír y disfrutar más, amén de lo extenuados que acabamos, pero sin duda valió la pena vivir momentos tan gratos como los que vivimos.
También otra enorme y grata sorpresa fue la presencia de Víctor, que nos vino a deleitar con sus dos aviones y su vuelta a un club que le añora y al que le encantaría tenerlo de nuevo entre sus miembros.
Finalmente quiero dar las gracias a todos los que ayer hicieron posible semejante quedada, Joaquín, Nacho, Pachu, Paco Lao, Carlos Alba, Héctor y Víctor…y a los socios del club que no estuvieron pero no por ello no echados de menos. Gracias a todos.
Francisco Vidal.
Comentarios de Joaquin Gª Gazquez:
Ciertamente me apunte a semejante disparate para apoyar la iniciativa de Francisco Vidal, a quien tengo en alta estima, pero sabiendo de antemano, que en lo que a mi respecta sería un fracaso modelístico, aquí no estamos hablando de quien hace mejor su maqueta, si no de QUIEN cumple con el reto, así que por mi parte, ha supuesto un autentico fracaso. Decididamente, no sirvo para estas cosas.
Lo realmente importante, es lo bien que lo pasamos, las risas y el puro cachondeo, de los nervios que conforme avanzaba el día, y nos íbamos dando cuenta del «embolao» en el que nos habíamos metido, y muy importante también, ver como gente joven tiene el gusanillo del modelismo, y este está en buenas manos. Yo como los malos alumnos, volveré la semana próxima, a hacer la recuperación.
En resumen, ha sido una experiencia inolvidable, que me temo, volveremos a repetir.
Gracias chicos.